¿Cómo se hace un mandil masónico?

¿Cómo se hace un mandil masónico?

La elección de los materiales

Para confeccionar un mandil masónico es elemental comprender que se trata de piezas artísticas. Estas tienen como objetivo primario vestir al hermano masón que los porta y, por supuesto, mostrar el grado que este ostenta.

Los mandiles masónicos son un elemento que ha estado presente desde los inicios de nuestra agrupación, se han elaborado en muchas formas y en tamaños variados. Sin embargo, en fechas recientes, se han "uniformado" los criterios para la creación de estos paramentos a partir de los lineamientos de las grandes potencias masónicas. Esto crea un abanico de posibilidades "limitado" para los creadores de mandiles, pues debemos ceñirnos a lo que estos códigos de vestimenta marcan.

Los mandiles entonces, tienen que incluir materiales de la más alta calidad, puesto que no se trata de un elemento para lo producción en masa. Aunque no lo parezca, cada mandil, por más similar que resulte a otro, es único en su tipo. En este sentido, debemos elegir cuidadosamente los elementos característicos:

  • Piel o tacto piel: Según sea el caso, los mandiles pueden ser elaborados con piel genuina o con imitaciones de calidades similares.
  • Listón: Usualmente se utiliza moaré de alta calidad.
  • Hilo: El mejor que se pueda permitir; esto incluye hilos metálicos y de colores especiales.
  • Tela: Esta se utiliza en la parte trasera.
  • Correas y herrajes: Se deben preferir de alta calidad para evitar rupturas.

Estos son tan solo algunos de los aspectos que se deben tomar en cuenta al momento de elaborar mandiles masónicos.

El tipo de mandil que se realizará

Como hemos mencionado anteriormente, los mandiles masónicos han acompañado a nuestra institución a lo largo de su historia por cientos de años. En este sentido, han sido testigos de las variaciones a los sistemas ritualísticos que la propia masonería ha creado.

De este modo, existen mandiles masónicos por grado, por sistema, por región, por jurisdicción y hasta por el gusto de los hermanos, pues hay logias que solicitan mandiles por encargo. Por lo anterior, es elemental contar con toda la información necesaria para la realización de la pieza que se diseñará, de lo contrario, podríamos cometer errores que derivarían en una alteración del mandil.

Una vez comprendida la simbología que contiene el mandil que realizaremos y el materia que se utilizará en ese mandil en particular, toca el turno de los bordados.

El bordado es crucial en un mandil masónico

El bordado de un mandil masónico está íntimamente ligado con el tipo del mandil y los materiales que se eligieron para esto. Es indispensable contar con un experto en el área del bordado tanto para la parte del software como para la ejecución del mandil; de esto dependerá el éxito o el fracaso del proyecto que se realiza.

Los bordadores expertos utilizan técnicas especiales para diseñar cada una de las puntadas que se usan para la confección del mandil. Para lograr el mejor resultado, estos conocedores artesanos, utilizan lo mejor de sus habilidades de diseño y de conocimientos técnicos para que, al momento de ejecutar la obra, esta no tenga detalles estéticos o de utilidad.

Cuando el diseño del bordado está terminado, se procede a la elaboración sobre el trozo de piel que se destinó para el proyecto. La mayoría de los mandiles masónicos de alta calidad son bordados utilizando software y máquinas industriales especiales. Esto garantiza que la calidad en el producto final sea óptima.

Los acabados finales

Para concluir la elaboración de estas bellas piezas de arte es necesario "armarlo". Este proceso es realizado por expertos costureros. Estos hábiles profesionales utilizan lo mejor de sus conocimientos para brindar un acabado de calidad digno de ser portado en nuestras sesiones masónicas.

Se procede a coser cada pieza en su sitio, colocar los listones de los colores deseados y ensamblar las partes frontal y trasera junto con las correas que se destinaron para este propósito.

En la elaboración de mandiles cada detalle cuenta, por lo que una vez finalizado el proceso de costura de estas piezas, se procede a "limpiar" de imperfecciones o líneas de referencia. Esto garantiza que el resultado final sea pulcro y aceptable para la entrega en manos de su nuevo portador.

Esperamos que estas breves líneas hayan sido de utilidad para conocer un poco más sobre el intrincado mundo de la elaboración de parafernalia masónica. No olviden recomendarnos con sus hermanos y difundir nuestra tienda.

D.

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